Comenzar el día con un buen desayuno
Es aconsejable que en nuestro desayuno estén presentes los siguientes alimentos:
Lácteos (leche, yogur, queso): aportan proteínas, vitaminas A y D y algunas del grupo B, calcio y fósforo.
Cereales como pan (blanco o integral), galletas, bizcochuelos, cereales en copos: nos aportan hidratos de carbono, vitaminas y proteínas. Si los cereales son integrales aportan además fibra.
Una fruta o jugo natural (fruta fresca es lo más recomendable): aportan vitaminas, minerales, y fibra. Debemos evitar ante todo los jugos comerciales por su alto contenido en azúcar y su carencia en vitaminas)
Un desayuno equilibrado y realizado a diario tiene repercusiones positivas en el mantenimiento de la salud, así como también en el rendimiento físico e intelectual.
Lic. Eliana Gorga
Commentaires